

El buen vivir es conexión, tejido y red. Buen vivir es una manera que habla de ti, del otro y de nosotros. El buen vivir es un nosotros en armonía, en relaciones recíprocas, equilibradas y con mutua complementariedad.
Con el apoyo de France Volontaires hemos desarrollado el INFORME: Aportaciones del Buen Vivir en los Procesos del Voluntariado.
Conoce la influencia o acción del Buen Vivir en las prácticas de voluntariado en las comunidades Wayuu de La Guajira.

Juanita Pérez
Licenciada en Docente.

Fernanda Murcia
Trabajadora social

Gustavo Gómez
Diseñador Gráfico

Sara Espitia
Comunicadora Social y Periodista.
Aquí te contamos más sobre la convocatoria en France Volontaires y el proceso que realizamos con los voluntarios en el territorio, para el desarrollo del documento
Este taller estuvo pensado en el marco de la conmemoración del día internacional de los pueblos indígenas, pero también en el contexto del lanzamiento de la tercera edición del Fondo para la Innovación en el Voluntariado (FIV). En efecto, la organización Tepiapa fue uno de los ganadores de la segunda edición del FIV con la iniciativa “Aportaciones del buen vivir en los procesos del voluntariado”, un documento compuesto por guías teóricas y prácticas sobre las aportaciones del Buen Vivir – modo de vida propio de las comunidades indígenas de América – a los procesos de voluntariado en el continente.
La idea de este encuentro fue reunir a organizaciones que movilizan a voluntarios, que tienen impacto en las comunidades indígenas y que provienen de los 6 países del programa EnLAzando (Colombia, Perú, Ecuador, Bolivia, Argentina y Paraguay). De tal manera, el objetivo fue establecer los escenarios de los distintos voluntariados en el continente sudamericano que acumulan procesos humanitarios, altruistas, sociales, comunitarios y de empoderamiento para la transformación social y personal del mundo, a fin de crear conocimientos en el ámbito del voluntariado en las comunidades indígenas para que las organizaciones puedan fortalecer sus capacidades a través del intercambio de experiencias.


“Aportaciones del buen vivir en los procesos del voluntariado”, abrimos un escenario de conversación entre los participantes para identificar qué tipos de prácticas se han tenido en cada una de las actividades de voluntariado que se realizan en las instituciones. Fruto de esa conversación se encontraron que el voluntariado no solo es una fuerza social movilizada por la empatía a grupos sociales en situaciones difíciles de no dignificación y satisfacción de derechos fundamentales. También, es el voluntariado, una fuerza revolucionaria de transformación social. En tanto que, como voluntariado resistimos a las situaciones crueles que pueden experimentar los circuitos sociales de extrema pobreza, especialmente en los territorios de los pueblos originarios, como se viene presentando en el departamento de La Guajira.
El voluntariado en América Latina es muy diverso y existen muchas maneras de entender y hacer voluntariado lo que dificulta el consenso y la acción conjunta entre actores. Del mismo modo, el voluntariado hace frente a varios desafíos compartidos: la falta de medición del voluntariado, la profesionalización de la gestión de voluntarios, la puesta en valor y el reconocimiento de la acción voluntaria como herramienta de solidaridad para el desarrollo, la institucionalización del voluntariado y su inscripción en marcos normativos y políticas públicas, etc.
Compartir e intercambiar conocimiento y experiencias sobre voluntariado facilitó la creación de una cultura común de voluntariado, dando visibilidad a temáticas claves para el fortalecimiento del sector. También ayudó a fortalecer las competencias de los actores del voluntariado y favoreció el trabajo en red y la cooperación entre actores, facilitando así la formulación de respuestas colectivas y colaborativas a los diferentes desafíos del sector.
